Por Lola García, presidenta del Cabildo de Fuerteventura — 24 de octubre de 2025
En Fuerteventura hemos demostrado durante años que, cuando existe planificación y voluntad política, las administraciones pueden trabajar juntas para avanzar en materia educativa. Ayuntamientos y Cabildo cedimos suelos, habilitamos espacios provisionales y aportamos personal con un único objetivo: garantizar la construcción y mejora de colegios e institutos en una isla que crece a un ritmo acelerado.
Ese esfuerzo se vio acompañado durante etapas en las que existía coordinación con los equipos de Educación del Gobierno de Canarias. Se ejecutaron proyectos, se avanzó en infraestructuras y se dio respuesta —con retrasos, pero respuesta al fin— a las demandas de familias, docentes y AMPAS.
Sin embargo, la falta de planificación y diálogo de los últimos años ha generado un retroceso evidente. Hoy siguen pendientes actuaciones esenciales en centros como el CEPA de adultos de Puerto del Rosario, el CIFP Majada Marcial, la Escuela de Arte en el Parque Tecnológico o los proyectos comprometidos para Gran Tarajal y Tarajalejo. La Formación Profesional no crece al ritmo que requiere la isla, faltan espacios y en algunos centros ya no caben más aulas.
Fuerteventura no puede resignarse a una gestión que llega a la isla solo “para la foto”. Nuestra realidad educativa requiere planificación, recursos y, sobre todo, una Consejería que escuche, planifique y se siente a trabajar con las instituciones locales y la comunidad educativa.
Seguiremos colaborando desde el Cabildo y los ayuntamientos, pero reclamamos una hoja de ruta seria, estable y consensuada. Porque invertir en educación es invertir en igualdad, progreso y futuro para las nuevas generaciones de Fuerteventura.



