El Ayuntamiento de Antigua ha dejado claro que comparte la preocupación vecinal por la instalación de una antena de telecomunicaciones cerca de viviendas, pero subraya que no tomará ninguna medida que contravenga el marco legal vigente. Así lo expresó el alcalde, Matías Peña, tras una reunión mantenida este miércoles con el abogado que representa a los vecinos afectados.
“El objetivo del Ayuntamiento es frenar la instalación en ese emplazamiento, pero no por encima de la ley”, recalcó el alcalde. Según explicó, ya se han ofrecido alternativas a la ubicación finalmente escogida por la empresa, y se seguirá trabajando desde el consistorio en otras opciones legales que puedan evitar la ejecución del proyecto.
Durante el encuentro, al que asistieron también concejales del grupo de gobierno, el alcalde insistió en que se trataba de una reunión de carácter jurídico, para valorar conjuntamente vías legales de actuación. Sin embargo, indicó que el letrado de los vecinos, en sus propias palabras, acudió como representante de quienes le han contratado, con una visión diferente a la planteada desde el consistorio.
“El equipo técnico y jurídico del Ayuntamiento son mis ojos. No firmaré ninguna paralización si no cuenta con respaldo legal. Ahora bien, si el abogado de los vecinos encuentra una vía judicial viable, adelante. Y si algún concejal considera que puede firmar la paralización, que lo haga cuando lo desee”, señaló Peña.
El alcalde insistió en que el verdadero problema no es la antena ni la empresa instaladora, ni el propietario del terreno, ni el Ayuntamiento: “El verdadero obstáculo es el marco legal estatal que ampara la imposición de estos emplazamientos. No los queremos, pero la ley actual los protege”.