La presidenta del Cabildo de Fuerteventura, Lola García, se ha reunido con representantes de la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA) para analizar la situación de la torre de control, gestionada actualmente por la empresa privada SAERCO.
Según expuso USCA, la compañía ha reconocido ante los tribunales que no puede cumplir con las condiciones laborales adecuadas, ya que ello supondría su quiebra. Esta inviabilidad económica, advierten, compromete la seguridad, continuidad y sostenibilidad del servicio. Entre los problemas detectados figuran la falta de cobertura en turnos y guardias, movilización de personal sin habilitación y precarización laboral.
USCA y el Cabildo proponen sustituir a SAERCO por ENAIRE, proveedor público, y han trasladado esta solicitud al Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible. Además, la corporación insular trabaja con los cabildos de La Palma y Lanzarote para presentar la petición de forma conjunta en la Federación Canaria de Islas (FECAI).
Lola García subrayó que el correcto funcionamiento del aeropuerto es esencial para la economía y la vida en la isla, y que se mantendrá un seguimiento continuo de la situación. Desde USCA, por su parte, se han comprometido a informar de cualquier novedad hasta que el servicio recupere condiciones óptimas.