El Parlamento aprueba una propuesta del Grupo Socialista, enriquecida por el Grupo Nacionalista, que prevé un informe técnico y una mesa de trabajo con sindicatos, empresarios y expertos
El Parlamento de Canarias ha aprobado este miércoles una Proposición No de Ley (PNL), impulsada por el Grupo Socialista y enriquecida con enmiendas del Grupo Nacionalista Canario, para analizar el impacto que tiene la creciente adquisición de hoteles por parte de fondos de inversión en el Archipiélago. El objetivo es prevenir posibles consecuencias negativas para los salarios, el empleo y la economía local.
Ambos grupos coincidieron en la necesidad de estudiar en profundidad este fenómeno, que ya afecta a más del 15% del parque alojativo de Canarias, con más de 100 hoteles y unas 40.000 camas bajo propiedad de capital financiero. Sólo desde 2020, estas inversiones han superado los 3.200 millones de euros, situando a Canarias como líder en España en este tipo de operaciones.
La propuesta incluye la elaboración de un informe técnico, encargado al Consejo Económico y Social de Canarias con apoyo del ISTAC y las universidades públicas, que analice el impacto de este modelo de propiedad sobre la fiscalidad, los beneficios económicos, el empleo, los salarios y la estructura de la cadena de valor turística.
Una vez elaborado el informe, el Parlamento insta al Gobierno de Canarias a convocar una mesa de trabajo tripartita con sindicatos, patronales y expertos. Esta mesa abordará las posibles consecuencias económicas y sociolaborales y permitirá consensuar decisiones a medio y largo plazo.
El diputado socialista Manuel Hernández alertó de los riesgos que supone este modelo financiero, basado en compras apalancadas con altas cargas de deuda, que pueden presionar los salarios a la baja, reducir beneficios fiscales y comprometer la sostenibilidad del sistema. “No podemos avalar un modelo extractivo que beneficia a unos pocos y empobrece a muchos”, afirmó.
Por su parte, el portavoz del Grupo Nacionalista, José Miguel Barragán, destacó que las enmiendas presentadas por su grupo refuerzan la iniciativa original: “No se trata de señalar a ningún inversor, sino de conocer los efectos reales de esta transformación silenciosa y garantizar que la riqueza que genera el turismo se quede en Canarias y mejore las condiciones de vida de nuestra gente”.